lunes, 7 de mayo de 2012

CUENTO HINDÚ

¿QUÉ EL FELICIDAD?

Un día, un rico industrial se horrorizó cuando vio a un pescador tranquilamente recostado contra su barca.
.-¿Por qué no has salido a pescar?-le preguntó
.-Porque ya he pescado bastante hoy-respondió el pescador.
.-¿Y por qué no pescas más de lo que necesitas?- insistió el industrial-
.-¿Y qué iba a hacer con ello?- preguntó a su vez el pescador.
.-Ganarías más dinero- fue la respuesta-. De ese modo,  podrías  poner un motor a tu barca y así adentrarte en aguas más profundas y pescar más peces. Entonces ganaría lo suficiente para  comprarte  unas redes  de nylon
 con las que obtendrías más peces y más dinero. Pronto ganarías para tener dos barcas...y hasta una verdadera flota y podrías ser tan rico como yo-
.-¿Y qué haría entonces? - inquirió de nuevo el pescador.
.-Podrías sentarte y disfrutar de la vida.
.-¿Y qué crees que estoy haciendo ahora?- respondió el pescador satisfecho .


ACTIVIDAD:

a)¿Donde encuentra cada personaje su felicidad?

¿Con cuál de los dos posturas estás más de acuerdo? Explica.

domingo, 6 de mayo de 2012

PARA REFLEXIONAR

PARÁBOLA DEL HOMBRE CON LAS MANOS ATADAS.

(primera parte)
Érase un hombre como todos los demás, un hombre normal. Tenia cualidades positivas y negativas. No era diferente
 Una vez llamaron repentinamente a la puerta. Cuando salió se encontró a sus amigos. Eran varios y habían venido juntos.
Sus amigos le ataron las manos.
Después le dijeron que así era mejor, que así, con sus manos atadas no podría hacer nada malo (se olvidaron de decirle que tampoco podría hacer nada bueno).
Y se fueron dejando a un guardián a la puerta para que nadie pudiera  desatarle.
Al principio se desesperó y trató de romper las ataduras. Cuando se convenció de lo inútil de sus esfuerzos, intentó poco a poco acomodarse a la nueva situación.
Poco a poco, consiguió valerse para seguir subsistiendo con las manos atadas. Inicialmente le costaba hasta quitarse los zapatos. Hubo un día que consiguió liar y encender un cigarrillo. Y empezó a olvidarse de que antes tenía las manos  las manos libres.

(segunda parte)
Pasaron muchos años. El hombre llegó a acostumbrarse a sus manos atadas. Mientras tanto, su  guardián le comunicaba día a día cosas malas que hacían en el exterior los hombres con las manos libres (se olvidaba decirle de las cosas buenas en el exterior con las manos libres).
Siguieron pasando los años. El hombre llegó a acostumbrarse a sus manos atadas. Y cuando el guardián le señalaba que, gracias  a aquella noche en que entraron a atarle, él, el hombre de las manos atadas, no podía hacer nada malo(no le señalaba que tampoco podía hacer nada bueno), el hombre comenzó a creer que era mejor vivir con las manos atadas.
Además, estaba tan acostumbrado  a las ligaduras....
Pasaron muchos, muchísimos años...
Un día sus amigos sorprendieron al guardián , entraron en la casa y rompieron las ligaduras que ataban las manos del hombre.
"Ya eres libre ", le dijeron.
Pero habían llegado demasiado tarde.
Las manos del hombre estaban totalmente atrofiadas.